Marcelina Román: La vida es hacer realidad los sueños con trabajo duro

Repertorio hispano en la Gala de Fin de Año en Poznań 

Nacida en Polonia, la soprano Marcelina Román comenzó su educación musical como violonchelista y sus estudios vocales en la Academia de Música Karol Lipiński en Wroclaw y se graduó de la Academia con distinción especial. Ha ganado premios en numerosos concursos nacionales e internacionales. En 2013, hizo su debut profesional en la Ópera Bałtycka de Gdansk como Violetta en «La Traviata» de G. Verdi. Durante los primeros años de su carrera su nombre artístico fue Marcelina Beucher. Marcelina Román

Su repertorio incluye obras de Mozart, Bizet, Verdi, Puccini y Massenet. Sus compromisos de conciertos la llevaron a las salas de música de Polonia, Rusia, Estados Unidos, Países Bajos, Alemania, Rumania, Indonesia, Letonia, Lituania, Italia y Francia. Marcelina Román ha colaborado con muchos directores de escena como: M. Znaniecki, K. Sofulak L. Adamik y B. Kosky / S. Andrade y ha trabajado con directores de orquesta conocidos como: A. Yurkevych, J. M. Florencio, T. Kozłowski y B. Bayl. Marcelina Román

Marcelina Román, la soprano / Foto: © MIMOLEK
Marcelina Román, la soprano / Foto: © MIMOLEK

De niña empezó a estudiar el violoncelo, ¿qué le llevó a dedicarse al canto? 

Mi madre y mi abuela eran cantantes de ópera y aunque hubiera querido ir a contracorriente la ópera era mi destino. Nací y me crié en una casa llena de música ya que mi padre tocaba el contrabajo en orquestas de Polonia y Valladolid. Una de nuestras tradiciones familiares ha sido siempre cantar un villancico antes de coger los regalos del árbol de Navidad. Todos tocábamos instrumentos mientras el miembro de la familia elegido para abrir su presente cantaba su villancico. Tocar el violonchelo, el piano y el fagot fue realmente una decisión de mis padres, ya que empecé cuando tenía 5 años. Mis padres me dieron la libertad de elegir si quería cantar así que una vez que decidí hacerlo fue porque era mi vocación y mi pasión. 

¿Algún recuerdo como espectadora que se le haya quedado grabado en su memoria?

Una de las actuaciones que me causó una gran impresión como espectadora fue la representación en la Metropolitan Opera House de Nueva York de Roberto Devereux de  Donizetti con Radvanovsky, Garanča, Polenzani, Kwiecień. Fue mi primera visita a este extraordinario teatro y recuerdo sentirme como si estuviera en una película.  El nivel de rendimiento y la calidad de toda la actuación fue excepcional e inspirador para una cantante en ascenso como yo lo era en ese momento.

La soprano Marcelina Román (née Beucher) / Foto: © Marta Zbieron
La soprano Marcelina Román (née Beucher) / Foto: © Marta Zbieron

Ha ganado muchos premios, ¿existe alguno del que se sienta especialmente orgullosa? 

Estoy muy orgullosa de todos mis premios. Se necesita mucha preparación y siempre pongo todo mi corazón en ello. Los concursos también me han proporcionado la oportunidad de aprender mucho, así como la de conocer a gente increíble, como por ejemplo Eva Marton en Budapest. Uno de los concursos que me vienen a la mente es el de Adam Didur, en Polonia, en el que la final era un aria escénica completa con el vestuario adecuado de la ópera. El concurso más difícil fue el IVC de los Países Bajos. El presidente del jurado era Dame Kiri te Kanawa. Por supuesto, Operalia de Plácido Domingo también es un recuerdo importante donde aprendí a cómo desarrollarme vocalmente, elegir los papeles adecuados y trabajar en la evolución de mi carrera.

¿Cuáles son sus compositores favoritos a la hora de elegir un papel para cantar? 

Mis compositores favoritos son Mozart, Puccini y Verdi. Sobre todo Mozart, ya que sus composiciones ponen a prueba nuestra capacidad técnica para cantar. Una vez que puedes interpretar a Mozart, tienes la capacidad de interpretar después a Puccini y Verdi. Siempre intento tener a Mozart en mi repertorio.

¿Qué diferencias existen entre cantar en su lengua materna o hacerlo en una lengua extranjera? 

Tengo la increíble suerte de poder cantar en varios idiomas, por lo que he tenido la oportunidad de hablar también con fluidez en muchos de ellos. Hay un estilo y color específico de la música en cada idioma así que por eso cada vez que cambio de lengua en las representaciones debo dedicar un tiempo importante en los ensayos para poder ser capaz de armonizar con el idioma. Cuanto más se practica, tanto mejor puedes cantar en el idioma, y cuanto mejor cantas mejor hablarás y por tanto se convierte en un círculo virtuoso. El polaco, que es mi lengua, no es necesariamente el más fácil de cantar, por la cantidad de letras diacríticas que no existen en otros idiomas. Estoy agradecida porque crecí hablando polaco lo que facilita mi canto en ese idioma, pero puedo imaginar que podría ser bastante difícil para un no nativo cantar en polaco. 

¿Cuál ha sido para usted su papel más importante hasta la fecha?

El logro más memorable para mí fue mi debut hace 10 años. Interpreté el papel de Violetta (La traviata) y mis emociones eran enormes, nunca lo olvidaré.  Mis compañeros de escena y el director de orquesta tenían mucha experiencia y me sentí muy cómoda trabajando con ellos. Es fundamental en nuestro trabajo, con quién compartimos el escenario y cómo es el ambiente. Tuve mucha suerte de tener un debut tan inusual.  También recibí mucho apoyo de mi familia, amigos y la audiencia en general. Mi madre recuerda que no vio la mitad de la ópera porque sus lágrimas se lo impedían. Con un comienzo tan fuerte de mi carrera, por el que recibí el premio al Debut del Año, los siguientes papeles también fueron sueños hechos realidad.

¿Qué papeles le gustaría interpretar que todavía no haya cantado? 

Me encantaría cantar Tatiana en Eugene Onegin de Tchaikovsky, Elsa de Lohengrin de Wagner y Leonore de Il Trovatore de Verdi. Soy una firme creyente de que en la vida se trata de hacer realidad los sueños a través de un trabajo duro y centrándose siempre en los roles que se desean realizar. Mi voz ha madurado y después del nacimiento de nuestros maravillosos gemelos, sé que puedo asumir este tipo de roles.

Marcelina Román como Eurydice en la producción de "Orphée aux enfers" de la Ópera de Cracovia (2022) / Foto: © Ryszard Kornecki
Marcelina Román como Eurydice en la producción de «Orphée aux enfers» de la Ópera de Cracovia (2022) / Foto: © Ryszard Kornecki

Para conseguir una buena interpretación, ¿qué factores son importantes para usted? 

Mucho trabajo con un buen repertorista y un gran pianista. Hay que empezar con un nivel de preparación muy alto y mantenerse en ese nivel hasta el final. Como parte de mi preparación, dedico tiempo a analizar el texto y a repasar la música cuidadosamente. Suelo ser capaz de entrar en un papel en pocos días, pero luego me encanta profundizar cada vez más en los detalles. La clave está en apropiarse de la musicalidad de la interpretación y en la preparación.

¿Qué proyectos tiene para un futuro próximo?

Mis próximas actuaciones serán una serie de conciertos con Łukasz Borowicz en la Filarmónica de Poznań, conciertos con repertorio de música vienesa, de arias de ópera, canciones españolas y algo de zarzuela en la Gala de Fin de Año, ¡me encanta!. Luego cantaré el papel principal del oratorio Ruth de Georg Schumann, en la Filarmónica de Berlín, con el maestro Weigle. A lo largo de 2023, combinaré actuaciones y conciertos con eventos benéficos, entre ellos alguno con la Fundación Clarós en Barcelona. En estos tiempos difí

https://www.operaworld.es/marcelina-roman-la-vida-es-hacer-realidad-los-suenos-con-trabajo-duro/ciles, el arte debe desempeñar un papel en ayudar a las personas necesitadas. 

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